Simon Bolivar!
U.E COLEGIO CARLOS SOUBLETTE - LIBERTADORES
jueves, 22 de marzo de 2012
miércoles, 21 de marzo de 2012
Jose Tadeo Monagas
José Tadeo Monagas
Nace en Tamarindo de Amana, Maturín (Edo. Monagas) el 28 de Octubre de 1784 y Muere en Caracas el 18 de Noviembre de 1868. Caudillo militar y político oriental, quien directa o indirectamente estuvo vinculado al poder, en la Venezuela de mediados del siglo XIX. Fue presidente de la República en dos períodos 1847-1851 y 1855-1858. Sus padres fueron Francisco José Monagas y Perfecta Burgos Villana, quienes lo bautizaron con el nombre de Judas Tadeo, sin embargo, la costumbre de utilizar tan sólo la inicial del primer nombre para la identificación devino con el tiempo en José Tadeo. Desde un primer momento, sus padres se encargaron de proporcionarle una educación orientada hacia el apego a la tierra y a las faenas del campo. Inició su carrera militar desempeñando el cargo de alférez de caballería, bajo las órdenes del coronel Manuel Villapol en el ejército patriota del general Santiago Mariño. En el año de 1813, recibió su bautismo de fuego en el combate de las Bocas del Pao; ese mismo año se distingue en reñidas batallas contra las fuerzas realistas dirigidas por Lorenzo Fernández de la Hoz (18 de marzo) y Domingo de Monteverde (25 de mayo), ambas libradas en Maturín y posteriormente se enfrenta en Cachipo, a José Tomás Boves (II de septiembre).
En 1814 participa en el sitio de La Puerta (3 de febrero), en la batalla de Bocachica (31 de marzo), y en la primera batalla de Carabobo, tras la cual obtiene el grado de coronel (28 de mayo). En 1817 coopera con el general Simón Bolívar en oriente y, en 1818, participa en la batalla de Calabozo librada contra Pablo Morillo (II de febrero), en la del sitio del Semen (16 de marzo) y en la de Ortiz, donde le toca enfrentarse al general realista Miguel de Torre (26 de marzo). En 1820, toma parte en el ataque a las Trincheras de Quimiare (2 de noviembre) contra Chicual Guzmán y para 1821, es ascendido por el Libertador al grado de general de división. Un año después obtiene el cargo de gobernador civil y militar de Barcelona y comandante del departamento del Orinoco, retirándose luego, a la tranquilidad de las faenas del campo. En 1823 se casó con Luisa Oriach Ladrón de Guevara, hija de Francisco José Oriach y de María Antonia Ladrón de Guevara.
En 1830, decide romper con la rutina de la vida campestre para incorporarse al desarrollo de los acontecimientos que conmovían al país. Por este tiempo, la reacción antibolivariana que se había desatado, amenazaba la estabilidad política y unidad de la Gran Colombia. No obstante, ante estas circunstancias Monagas asumió en un primer momento una actitud que oscilaba a favor y en contra de la separación de Venezuela de la unidad colombiana. En este sentido, a pesar de haberse mostrado abiertamente dispuesto a defender la aplicación de un sistema federal, participa en la llamada Pacificación de Oriente y en 1831, con el apoyo de su hermano José Gregorio, promueve un movimiento a favor de la reconstitución de la Gran Colombia, auspiciando la adhesión de todas las provincias orientales. Sin embargo, contrariamente a los gestores del movimiento separatista que buscaban crear una república de tipo centralista en el antiguo territorio de la capitanía general de Venezuela, Monagas promueve la formación de un "Estado de Oriente", que estaría integrado por las provincias de Cumaná, Margarita y Guayana. Asimismo, propugna la implantación de una confederación para la cual invita a las demás provincias de Venezuela, así como a las de la antigua Gran Colombia que así lo quisieran, a formar parte de ella. En mayo de 1831, se reúne una junta de 150 vecinos de la ciudad de Barcelona, para investir provisionalmente con el cargo de gobernador en jefe del Estado de Oriente al general Santiago Mariño y al general José Tadeo Monagas como segundo jefe provisional hasta la instalación del primer congreso que se reuniría posteriormente. A todas estas, el presidente José Antonio Páez logra impedir el intento separatista oriental, al negociar con los hermanos Monagas y convencerlos de deponer las armas y someterse a la autoridad central. En tal sentido, el 23 de junio de 1831 un indulto decretado desde Valle de la Pascua, ofrece las garantías necesarias a los Monagas y a las demás personas comprometidas separatista. Por su parte, José Tadeo Monagas se retira una vez más a la vida privada.
Para 1834, se abre el período electoral del cual sale electo José María Vargas; la reacción militar contra el poder civil no se dejó esperar, y Monagas se destaca nuevamente al dirigir en oriente la insurrección armada que lleva el nombre de Revolución de las Reformas; sofocado militarmente dicho movimiento, un nuevo indulto, dictado en el cuartel de Pirital (Sabana del Roble) en noviembre de 1835, pone fin a la contienda en oriente. En 1846, Monagas es postulado como candidato a la presidencia de la República para el período 1847-1851, contando con el apoyo y las simpatías tanto de Páez como del presidente saliente Carlos Soublette. Luego de triunfar en las elecciones presidenciales, es confirmado en el cargo por el Congreso el 20 de enero de 1847 y toma posesión en Caracas el I de marzo. Caracterizado su gobierno por la ruptura con los grupos conservadores y por la aplicación de una serie de medidas consideradas por sus adversarios como arbitrarias, este primer período presidencial de Monagas (1847-1851) se verá signado por los sucesos del 24 de enero de 1848 que culminan con el asalto al Congreso Nacional por parte de Monagas y la imposición de su poder personal. Al término de su primer gobierno (1851) y bajo su tutela, es elegido presidente su hermano José Gregorio (1851-1855). Cabe destacar que tras la presidencia de su hermano, José Tadeo estuvo manejando todos los hilos de la política, hecho que se puso de manifiesto cuando fue reelecto para el ejercicio de la primera magistratura en el nuevo período que se extendería desde 1855 a 1859. Tras su reelección se generó en todo el país un descontento generalizado, por lo que los brotes insurreccionales no se hicieron esperar. Por tal motivo, ante el alzamiento promovido en Valencia por el general Julián Castro, Monagas renuncia a la presidencia el 15 de marzo de 1858, se asila en la Legación de Francia en Caracas y parte al exilio pocas semanas después.
Luego de 6 años en el exilio (1858-1864) retorna a Venezuela para agrupar en torno a su persona al grupo de descontentos con la administración del presidente Juan Crisóstomo Falcón, y a pesar de sus 83 años, le toca encabezar la llamada La Revolución Azul que derroca a Manuel Ezequiel Bruzual, sucesor interino de Falcón, y ocupa Caracas mediante un reñido combate librado en junio de 1868. Posteriormente, el 27 del mismo mes, José Tadeo Monagas, en su carácter de general en jefe de los ejércitos de la revolución, dicta un decreto reorganizando la administración ejecutiva general y el 30 promulga un nuevo decreto que declaraba vigente la Constitución Federal de 1864. Finalmente, se convocaron a elecciones para designar al nuevo presidente de la República, pero el viejo caudillo Monagas, cuya candidatura era la más fuerte, no logró ver culminar el proceso eleccionario y murió a los pocos meses de pulmonía. Sus restos reposan en el Panteón Nacional desde el 17 de mayo de 1877.
Jose Leandro Palacios
José Leandro Palacios
Nace en Caracas 1782 y muere en Caracas el 6 de Enero de 1836 Oficial (coronel) del ejército de Venezuela en la Guerra de Independencia. Diplomático. Inicialmente prestó sus servicios en las Fuerzas Armadas de España en Venezuela. En esa condición, actuó en la represión del movimiento independentista de Gual y España en 1797 y en 1806, figuró en las fuerzas que preparó el capitán general Manuel de Guevara Vasconcelos para hacer frente a la expedición del general Francisco de Miranda sobre Ocumare de la Costa y Coro. Los sucesos del 19 de abril de 1810 lo atraen a las filas patriotas y participa junto con los caraqueños que proclamaron la República. En 1810, acompañó a Francisco Rodríguez del Toro (marqués del Toro) en la campaña de Coro y actuó en las acciones de Aribanache (15 noviembre), Coro (28 noviembre) y Sabaneta (30 noviembre). Ostentaba el grado de teniente coronel y era comandante de una de las divisiones. Bajo las órdenes del general Miranda tomó parte en el sometimiento de los disidentes de Valencia en 1811. En agosto de ese año fue ascendido a coronel. Entre 1813 y 1814, fue comandante militar de La Guaira y como tal, le correspondió cumplir en febrero de 1814 la orden del Libertador Simón Bolívar de ejecutar a los presos españoles encerrados en las bóvedas. Bajo las órdenes del general José Félix Ribas, combatió en la batalla de Ocumare del Tuy (20.3.1814) contra Francisco Rosete. Participó en la acción de Bocachica (31.3.1814). En la primera batalla de Carabobo (28.5.1814) mandaba una división. Junto al Libertador combatió en la batalla de La Puerta (15.6. 1814), donde los republicanos fueron derrotados. Perdida la Segunda República, emigró a las Antillas. Terminada la guerra, el coronel José Leandro Palacios se desempeñó como diplomático: primero como cónsul general de Venezuela en los Estados Unidos de América en 1822 y más tarde, fue acreditado sucesivamente ante los gobiernos de Brasil, Francia e Inglaterra, hasta 1831. Se retiró luego a la vida privada.
Manuel Valdes
Manuel Valdés
Nace en Trinidad, 1780 y muere en Ciudad Bolívar (Edo. Bolívar) el 31 de Jujio de 1845. Oficial (general de división) del Ejército de Venezuela en la Guerra de Independencia. Político. Hijo de Juan Bautista Valdés de Yarza y de María Casanova. Se inició en la carrera militar como cadete de la Compañía Veterana de la isla de Trinidad, donde presenció los acontecimientos que determinaron la pérdida para España de esta posesión, que pasó a manos inglesas en 1797. Se trasladó a Caracas y en 1802 figura en el batallón de Infantería de la Reina. Su actividad como patriota comenzó con su participación en el movimiento del 19 de abril de 1810 en el oriente de Venezuela. Perdida la Primera República (1812), emigra a Trinidad junto con otros destacados republicanos: Santiago Mariño, José Francisco Bermúdez y Manuel Piar, quienes inmediatamente se propusieron buscar los medios para regresar a Venezuela. Es así como forma parte del grupo de los 45 hombres, según nos relata Daniel Florencio O'Leary, que «…sin dinero ni modo de obtenerlo, decidió este puñado de patriotas (...) redimir a Venezuela. Cinco fusiles y unos pocos cartuchos conforman su tren militar…» Confiados en su valor y apoyados en las buenas disposiciones de los pueblos, salieron de Trinidad y en la noche del 13 de enero de 1813 desembarcaron en las costas de Güiria a las órdenes de Mariño. En 1814, participa activamente junto con Mariño en la lucha contra las huestes realistas de José Tomás Boves en el centro de Venezuela, a donde se dirige en auxilio de las tropas de Simón Bolívar. Toma parte destacada en la primera batalla de Carabobo en mayo de ese año, al mando de la división del centro. Perdida nuevamente la República, Valdés emigra a Trinidad y, poco tiempo después, se une al Libertador en las Antillas y regresa en la Expedición de Los Cayos en 1816. Entre los años 1817 y 1820, Juan Manuel Valdés actúa en el oriente del país junto a Mariño, en el ataque a Cumaná (1817) y en Barcelona, al lado de Pedro María Freites (1817). Colabora en la campaña de Guayana, siendo uno de los sitiadores de Angostura y en ese mismo año 1817 aparece entre los oficiales del comando del general Rafael Urdaneta. Acompaña a Bolívar en la campaña del Centro (1818). En 1819 figura como jefe de la Legión Británica. En 1820 cambia su escenario militar y político, al ser comisionado como comandante del llamado Ejército del Cauca. Marcha al sur de Colombia en 1820 a realizar la campaña. Triunfa en Pitayó (Colombia) el 6 de junio de 1820. Fue derrotado en Genoy (febrero 1821). Con Bolívar, triunfa en Bomboná el 7 de abril de 1822. Allí fue ascendido a general de división. El 18 de marzo de 1823 recibió la comisión, en Guayaquil, para viajar al Perú como comandante de una división de 4.900 hombres, como auxilio militar de la Gran Colombia a la República del Perú. El mismo día zarpó de Guayaquil. Estas tropas recibieron en territorio peruano el nombre de Ejército del Centro, mandado por Valdés. Con el general Andrés de Santa Cruz hizo la segunda campaña a Intermedios, al sur del Perú y se distinguió en la batalla de Zepita (25.8.1823); allí fue condecorado con la medalla de los Vencedores. Su carrera política comienza en 1826 cuando fue designado comandante general del departamento de Guayana y en esa condición firma el acta que en 1828 pide que se le confieran a Bolívar los poderes de dictador. Ese mismo año es nombrado gobernador y comandante de armas en Santa Marta. Entre los años de 1830 y 1835, participa en la vida política venezolana; hace oposición a José Antonio Páez, lo que le crea cierto aislamiento; en 1835, participa en la Revolución de las Reformas y sale al destierro hasta 1845, cuando regresa a residir en Ciudad Bolívar, donde muere.
Pedro Salias
Pedro Salias
Nace en Caracas y muere en Aragua de Barcelona (Edo. Anzoátegui) el 17 de Agosto de 1814
Militar que combatió a favor de la Independencia. Hijo de Francisco Antonio Salias Tordesillas y de María Margarita Sanoja Cabeza de Vaca. Conforma junto con sus hermanos: Francisco, Juan, Mariano, Carlos y Vicente, un cuadro de patriotas que sirvieron a la causa de la República. En el momento del 19 de abril de 1810, Pedro Salias Sanoja se desempeñaba como empleado de rentas de la ciudad de San Carlos, cargo donde permanece hasta 1811, cuando se unió a las filas patriotas y sirvió como teniente del batallón de Línea, que un rico propietario de San Carlos de apellido Yánez había formado con sus propios recursos para la causa republicana. Bajo las órdenes de Miguel Ustáriz, durante la Primera República, actúa en el combate de Los Colorados de San Carlos (25.4.1812), perdido por los republicanos. Durante la Segunda República, con Vicente Campo Elías, auxilia al general José Félix Ribas en La Victoria el 12 de febrero de 1814, lo cual decide el triunfo a favor de los patriotas. Combate en las batallas de San Mateo, El Arao y primera de Carabobo, acciones de 1814. Perdida la Segunda República, ya como teniente coronel, emigra junto con Simón Bolívar al oriente del país y muere en la batalla de Aragua de Barcelona, al frente del batallón Caracas. Era miembro de la Orden de los Libertadores de Venezuela.
Santiago Mariño
Santiago Mariño
Nace en Valle del Espíritu Santo ( Edo. Nueva Esparta) el 25 de julio de 1788 y Muere en La Victoria (Edo. Aragua) el 4 de Septiembre de 1854. Oficial (general en jefe) del Ejército de Venezuela en la Guerra de Independencia, Santiago Mariño lideró la campaña que liberó al oriente venezolano de las fuerzas realistas en 1813. Su padre fue el capitán de milicias regladas Santiago Mariño de Acuña y su madre Atanasia Carige Fitzgerald, descendiente de irlandeses. Cursó estudios en Trinidad, donde sus padres habían fijado residencia cuando aún era un niño. Con tan sólo 22 años de edad, a raíz de los sucesos del 19 de abril de 1810 fue a Trinidad en el desempeño de una comisión que le fuera encomendada por el Ayuntamiento de Cumaná ante el gobernador británico de la isla. Dos años después tuvo su bautismo de fuego, al formar parte de la expedición que bajo las órdenes del coronel Manuel Villapol, salió de Cumaná con el encargo de dominar la insurrección surgida en la provincia de Guayana. Perdida la Primera República emigró a Trinidad en compañía de varios patriotas y de allí, en cuenta de la situación reinante en Venezuela con el gobierno del jefe español Domingo Monteverde, decide trasladarse al islote de Chacachacare, lugar donde se encontraba la hacienda de su hermana Concepción Mariño.
El 11 de enero de 1813, junto con 44 patriotas que habían emigrado con él a Trinidad, constituyó una junta en la cual se discutió y decidió una ofensiva para liberar al oriente de Venezuela de las manos españolas; a tal fin se redactó el documento conocido como Acta de Chacachacare, firmada por Mariño y en la que sirvieron como secretarios: Francisco Azcue, José Francisco Bermúdez, Manuel Piar y Manuel Valdés. Con el grado de coronel, Mariño fue ratificado como jefe de la expedición. Al día siguiente de la firma del acta, Mariño invadió el oriente venezolano donde condujo las operaciones militares que en el curso de 6 meses, dieron como resultado la liberación de las provincias de Barcelona y Cumaná. En febrero de 1814, acudió con su ejército en auxilio de Bolívar, quien operaba en el centro y occidente del país. En La Victoria, después de haber derrotado en Bocachica al jefe realista José Tomás Boves (31.3.1814), se entrevistaron Mariño y Bolívar el 5 de abril, para discutir los planes que desarrollarían los ejércitos de oriente y occidente respectivamente; de acuerdo con esto, marchó Mariño con 2.800 hombres hacia San Carlos contra el brigadier José Cevallos y en la sabana del Arao fue derrotado por el jefe realista (16.4.1814). La acción siguiente fue la primera batalla de Carabobo (28 de mayo) en la que Bolívar venció al mariscal de campo Juan Manuel Cajigal. De Carabobo, Mariño se dirigió al sitio de La Puerta donde junto a la Bolívar hizo frente a José Tomás Boves (15 de junio) con saldo desfavorable para los republicanos.
Perdida la Segunda República, de oriente emigró a Cartagena de Indias en compañía de Bolívar, y de allí a Jamaica y Haití. Como mayor general del Ejército Libertador, participó en la expedición de Los Cayos, comandada por Bolívar. Estas fuerzas arribaron a la isla de Margarita, en mayo de 1816. En la Villa del Norte (6 de mayo) una asamblea proclamó a Bolívar como jefe supremo de la República y a Mariño su segundo. En 1817 impuso sitio a Cumaná como paso previo a la liberación de oriente que, según su opinión, debía anteceder a la de Caracas. Por inspiración del canónigo José Cortés de Madariaga y de Mariño, el 8 de mayo de 1817 se reunió el Congreso de Cariaco, el cual decretó el restablecimiento del sistema federal para Venezuela, con un gobierno similar al que se había establecido en 1811; proyecto que sin embargo fracasó en poco tiempo. Cuando llevaba a cabo operaciones en oriente, en 1818, Mariño triunfó contra el coronel Francisco Jiménez en Cariaco (14 de marzo), y en la misma plaza fue derrotado por Agustín Nogueras (21 de octubre), por lo cual Bolívar tuvo que suspender la campaña que proyectaba desarrollar sobre Caracas, desde oriente.
Como diputado Mariño representó la provincia de Cumaná en el segundo Congreso de Venezuela, reunido en Angostura el 15 de febrero de 1819, del cual tuvo la licencia para volver al ejército. Ese mismo año, el 12 de junio, triunfó sobre el coronel Eugenio Arana en el combate de Cantaura; y mientras Bolívar operaba en la Nueva Granada tomó parte en el movimiento que desplazó a Francisco Antonio Zea de la vicepresidencia de la República; en su lugar fue nombrado el general en jefe Juan Bautista Arismendi, y Mariño quedó como comandante en jefe del ejército de oriente. Una vez que Bolívar llegó a la ciudad de Angostura, Mariño fue destacado en el Estado Mayor. Posteriormente, el 30 de mayo de 1821 fue nombrado jefe del Estado Mayor General del Ejército Libertador, y con ese cargo combatió en la batalla de Carabobo (24 de junio). En 1824, fue designado en Caracas presidente del Consejo de Guerra de Oficiales Generales que debía juzgar la conducta del general de brigada Lino Clemente en la pérdida de Maracaibo en 1823. En 1826 el Congreso de Colombia lo designó con el importante cargo de ministro juez de la Alta Corte, función que no pudo ejercer al estallar en Venezuela en abril de ese año el movimiento de La Cosiata, en el que fue uno de los principales dirigentes junto a José Antonio Páez. En 1827 se desempeñó como intendente y comandante general del departamento de Maturín.
Mariño fue uno de los artífices del movimiento que a fines de 1829 y comienzos de 1830, condujo a la restauración de la República de Venezuela. El 20 de enero de 1830, el Congreso de Colombia reunido en Bogotá, nombró de su seno una comisión presidida por el general Antonio José de Sucre, con el objetivo de tratar con los delegados de Venezuela el difícil tema de la disolución de la Gran Colombia. Por su parte, las autoridades venezolanas enviaron a Cúcuta una comisión cuyo presidente era el general Mariño. Finalmente, las conversaciones entre los delegados colombianos y venezolanos, no terminaron en un acuerdo. En 1834, Santiago Mariño se presentó como candidato a la presidencia de la República, pero los escrutinios favorecieron a José María Vargas en febrero del año siguiente. Tras su fracaso en los comicios electorales de 1835, Mariño acaudilló en julio de ese mismo año la llamada Revolución de las Reformas. No obstante, en 1836 dicho movimiento revolucionario fue controlado por José Antonio Páez, quien había sido nombrado jefe de operaciones por el presidente Vargas para este cometido. Luego de ser derrotado y capturado en su intento insurreccional, Mariño fue expulsado del país, por lo que comenzó un largo trajinar que lo llevó a Curazao, Jamaica, Haití y finalmente a la Nueva Granada. En 1848 regresó a Venezuela, siendo nombrado casi de inmediato comandante general del Ejército organizado por el presidente de la República José Tadeo Monagas, para hacer frente al levantamiento en armas del general Páez, a raíz de los acontecimientos del 24 de enero de 1848, que derivaron en el asalto al Congreso por parte de Monagas. Años después en 1853, fue reducido a prisión por su participación en la llamada Revolución de Mayo, la cual estalló la noche del 24 al 25 de mayo de dicho año, pero fue libertado tiempo después. Los últimos días de su existencia los pasó en La Victoria, retirado de las actividades públicas y políticas. Sus restos reposan en el Panteón Nacional desde el 29 de enero de 1877. Al igual que muchos personajes de nuestra historia, estuvo vinculado a la masonería, siendo miembro de esta orden en grado 33.
Jose Felix Blanco
Nace en Caracas el 24 de Septiembre de 1782 y Muere en Caracas el 18 de Marzo de 1872. Sacerdote venezolano, se incorporó con el grado de capellán militar al ejército independentista. También se destacó como funcionario público e historiador. Abandonado por sus padres fue criado por la negra libre Bartola Madrid. El apellido Blanco lo obtuvo de su padrino de confirmación el mantuano José Domingo Blanco. De acuerdo con investigaciones recientes se ha podido constatar que su madre fue María Belén Jerez de Aristiguieta y Blanco, importante dama del mantuanaje caraqueño. Sus estudios los inició en el Seminario de Caracas en 1795 y a fines de 1798, el obispo Juan Antonio de la Virgen María y Viana le concedió licencia para vestir hábito clerical. En 1805 solicitó su graduación universitaria después de haber cursado estudios de filosofía y teología en el seminario, pero ésta se le negó debido a su condición de expósito (persona abandonada por sus padres o de origen dudoso). No obstante, Blanco luchó con las autoridades universitarias y obtuvo en julio de 1807 una real cédula de Carlos IV que le daba la razón pese a la negativa del claustro universitario. En 1809 obtuvo la licencia por parte del Arzobispado para recibir las sagradas órdenes como sacerdote.
A raíz de los sucesos del 19 de abril de 1810, tiene una destacada participación en la lucha independentista. En este sentido, actúa junto al marqués del Toro en las fuerzas que se organizan para llevar a cabo la expedición de Coro, en calidad de capellán del ejército (1810), participando en las acciones de Aribanache (15 de Noviembre) y Sabaneta (30 de noviembre). En 1811 se incorpora como capellán del ejército del Generalísimo Francisco de Miranda, viendo acción en el sitio y asalto a la ciudad de Valencia. El 25 de abril de 1812 combate contra Domingo de Monteverde en Los Colorados de San Carlos y el 3 de mayo del mismo año se encontrará junto al coronel patriota Miguel Carabaño en los morros de Valencia. Tras la caída de la Primera República y la violación de Monteverde de la capitulación firmada por Miranda (25.7.1812), se marcha a la isla de Trinidad. En 1813, luego de la finalización de la Campaña Admirable toma parte en las acciones de Puerto Cabello, Bárbula (30 de septiembre) y Las Trincheras (3 de octubre), Barquisimeto (10 de noviembre), Vigirima (23, 24 y 25 de noviembre) y Araure (5 de diciembre). En marzo del año siguiente actúa junto a José Félix Ribas en Ocumare del Tuy y se integra al ejército del general Santiago Mariño para participar en los combates de Bocachica (31 de marzo). Luego de contribuir a la defensa de Valencia en el primer sitio de esa ciudad, asistió a la primera batalla de Carabobo librada el 28 de mayo de 1814.
Perdida la Segunda República (diciembre de 1814), formó parte del núcleo republicano que se retiró hacia la Nueva Granada. En dicha república, vio acción en la campaña de Magdalena junto al Libertador en 1815 y en la campaña de resistencia contra Pablo Morillo en 1816 a las órdenes del general José Antonio Páez, interviniendo además en las acciones de Achaguas y El Yagual. En 1817, se encontraba en Guayana donde prestó sus servicios como administrador, al reorganizar las misiones del Caroní. En este lugar estará a las órdenes del general Manuel Piar y poco después colabora en operaciones logísticas llevadas a cabo por el almirante Luis Brión. Tiempo después formó parte de los firmante de la Constitución de Cúcuta en 1821. En 1826, durante el desarrollo del movimiento separatista de La Cosiata (se buscaba separar a Venezuela de la Gran Colombia, integrada además por Ecuador y Colombia), colabora con el Libertador en la preparación de tropas para reforzar el Zulia y los Andes, en donde mandaba la provincia de Trujillo.
Como consecuencia de su desvinculación del ejercicio sacerdotal, debido a su participación en la lucha de Independencia, decidió solicitar ante la Santa Sede su secularización, la cual le fue concedida por el papa Gregorio XVI mediante un Breve del 5 de marzo de 1833, con la expresa prohibición de contraer matrimonio. Años después combatió como comandante de armas de la provincia de Maracaibo, contra las fuerzas de la Revolución de las Reformas en 1835. En 1837, siendo Secretario de Guerra y Marina, publicó en Caracas en el periódico La Bandera Nacional una relación sobre las campañas de la Independencia en las que había participado. En 1847 es secretario de Hacienda y Relaciones Exteriores. Tras apartarse de la vida pública, intentó en varias oportunidades (1848, 1850, 1852, y 1855) su reactivación como sacerdote, lo cual no le fue concedido por la Santa Sede. A partir de 1855, se dedicó a recopilar documentos relativos a la historia de Venezuela, tomando como partida la colección que 30 años antes habían publicado Cristóbal Mendoza y Francisco Javier Yánez. En términos generales, la colección formada por José Félix Blanco, con la ayuda de su amigo Ramón Azpurúa, incluía tanto documentos sobre Venezuela como del resto de América, desde la época precolombina hasta 1830.
En 1862, durante el desarrollo de la Guerra Federal, Blanco fue nombrado consejero de Estado. En 1863, por intercesión del arzobispo de Caracas, Silvestre Guevara y Lira, quien había viajado a Roma con motivo del Concordato, el papa Pío IX le concedió a Blanco su tan ansiada rehabilitación sacerdotal. A partir de este momento se dedicó a su ministerio religioso y a proseguir la compilación de los documentos históricos que, ya muerto él, fueron publicados por disposición del presidente Antonio Guzmán Blanco entre 1875 y 1877 en 14 volúmenes, bajo el título Documentos para la historia pública del Libertador con José Félix Blanco y Ramón Azpurúa como coautores. Los restos mortales de José Félix Blanco reposan en el Panteón Nacional desde el 3 de julio de 1896.
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